Que ni el miedo se atreva a interrumpirme,
porque propino hostias en su presente.
Que ni tu ni nadie me diga como es nada,
¡nunca!, porque todo enfoque miente.
No me jodas, prejuicio,
no lloriquees tras mi mente
no bailes con mis ideas,
no vistas mi inconsciente.
Muérete barrera,
voltéate inconsistente
¡qué te pasa mundo enfermo!
que te arrastras con tu gente
a todos en general. Si no creo ni a mis ojos, ¿por qué creer a los vuestros?
1 comentario:
Si ves que se te vuelve gigante,
yo te hecho una mano a lo de repartir hostias,
zarpazos o mordiskos
Publicar un comentario